La característica ACC de AMD es propia de la serie 7 de chipsets, que utiliza una depuración de canales alternos que van del Southbridge al procesador para cambiar aspectos del CPU, uno de ellos es el de los “núcleos desactivados”, que se utiliza en los últimos procesadores de AMD.
Esto le permite jugar al casino AMD: ve a comprar un triple núcleo económico, desbloquear su núcleo cuarto y esperar que funcione bien (con frecuencia lo hace). Como se puede imaginar, AMD no está del todo contento con esta característica que han utilizado la mayoría de los fabricantes de placas base, por lo que dejó fuera de su serie 8 de southbridges la interfaz del ACC, haciendo efectivamente imposible acceder al ACC.
Ahora, los fabricantes de placas madres encontraron una solución para evitar esta limitación, simplemente añadiendo un pequeño chip a la placa base que permite activar esta funcionalidad, aportando su interfaz ACC.